La ciencia al servicio del arte estadounidense creó un método de clasificación para evaluar varias obras de arte según su creatividad.
Este original medidor, es conocido como el “Timed machine experiment” y puede clasificar obras según sus características. Analiza todos los elementos de la pintura, desde el color y la textura hasta el tipo de escenas representadas.
Los resultados del experimento sorprenden. Por ejemplo, “El grito” de Edvar Munch fue considerado como excepcional y el más creativo fue el “Cristo Crucificado” de Francisco Goya.
Los creadores de este algoritmo son Ahmed Elgammal y Babak Saleh, científicos de la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, reconocen que estos resultados son imposibles de confirmar porque el software mide la originalidad de una pintura en lugar de su mérito según la época en la que se pintó.
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